Desde el tiempo que hemos adoptado metodologías y marcos de trabajo para establecer la visión de las organizaciones y traducirlas en un plan corporativo y tecnológico, nunca habíamos esperado ver que las cosas cambiaran completamente tan rápido. Hemos visto entre otras cosas, tres años de transformación digital en cuatro meses. Lo mismo ha pasado con la operación y la manera de hacer negocios. Todo ha cambiado. La crisis ha sido un acelerador de cambios como nunca lo habíamos visto.
Mientras la pandemia como todas las crisis trae consigo nuevos riesgos, también trae oportunidades para reinventar cómo la nueva planeación trabaja mejor para entender y analizar las estructuras de nuestro negocio e industria, el comportamiento del consumidor y los cambios sociales.
La tecnología sin duda nos apoyará a realizar análisis en tiempo real. Los datos de la realidad y resultados operativos frescos se vuelven mas relevantes que nunca para la toma de decisiones. El tiempo que tenemos para analizar es mucho mas corto que antes y hoy mas que nunca las tecnologías que proporcionen la información y los humanos capacitados que nos apoyen a interpretar la información juegan un papel decisivo.
La planeación entonces se debe adaptar a esta nueva dinámica, necesariamente. Aquí identificamos los ajustes mas relevantes a aplicar.
Adiós a la planeación de una sola línea, debemos incorporar distintos escenarios.
Debido a los drásticos cambios en la demanda y el suministro de bienes a nivel global y nacional, existe un extraordinario nivel de incertidumbre, lo que provoca que la planeación en una sola línea sea mas frágil que nunca. Los ejecutivos debemos reinventar la estrategia de las compañías. Una planeación en distintos escenarios deberán proveer un contexto mas amplio en la actuación de las empresas. Ciclos mas cortos de revisión, fuentes de información confiables y completas, serán la diferencia.
Ahora la planeación va de la mano con la salud pública y personal.
En estos tiempos todos estamos preocupados por la salud, así como por la economía propia y del entorno. Considerar los nuevos comportamientos de los consumidores asociados a cómo están cuidando su salud y cómo debemos cuidar su salud y la de los colaboradores se vuelve muy relevante al momento de realizar nuestros planes estratégicos. Esto significa que cada ejecutivo involucrado con la planeación deberá tomar en cuenta la interacción de la operación y la tecnología con la biología-salud de la gente relacionada, y todo lo anterior combinado impacta en los modelos de negocio y la creación de valor del negocio.
El aumento del trabajo colaborativo en línea.
Hay mucho más detrás de una sesión de planeación online que la simple sesión. Transferir el trabajo de planeación desde la oficina hasta el home office es relativamente fácil siempre y cuando se cuenten con ciertas capacidades tecnológicas: a) Todos los documentos y procesos están digitalizados, b) La infraestructura de datos y sistemas es accesible (con seguridad y control) desde cualquier sitio, c) Los anchos de banda y la infraestructura de comunicaciones son de calidad, d) Las videoconferencias soportadas por procesos desarrollados en la nube pueden reemplazar de manera adecuada las juntas cara a cara.
La tecnología es una base importante para la colaboración, sin embargo, el reto se encuentra en lograr la conexión de la planeación, el trabajo en equipo, la visibilidad de los procesos y el acercamiento con los clientes.
Los sentimientos ahora mas que nunca juegan un papel importante en la planeación estratégica, hoy hacemos énfasis en las necesidades físicas y mentales de nuestros clientes y colaboradores. El cuidado por los demás se ha convertido en un elemento crítico para el desarrollo de las organizaciones, y lo anterior ahora vuelve necesario tomarse en cuenta en la misión central de las organizaciones.
*Con textos de Francis Hintermann